¡Proletarios de todos los países, uníos!

VIVA EL 21º ANIVERSARIO DEL DÍA DE LA HEROICIDAD!

“El inagotable seno del pueblo los nutrió con sobrio alimento y los puso a andar; la lucha de clases fue modelando su mente; y el Partido, como la primera y más alta forma social, elevó su conciencia política armándola con el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento guía, potenció su combatividad organizándolos en Ejército Guerrillero Popular y fundiéndolos con las masas del campesinado pobre aceró su cuerpo y espíritu en la fragua inextinguible de la guerra popular. Devenidos en prisioneros de guerra nunca hincaron la rodilla y persistiendo en combatir, movilizar y producir en ardorosas bregas transformaron las sórdidas mazmorras del caduco y podrido Estado peruano en luminosas trincheras de combate.’

Presidente Gonzalo, ¡Gloria al Día de la Heroicidad!, junio de 1987

“Cada golpe del furioso imperialismo, cada derrota que nos inflige la burguesía internacional alza a la lucha a nuevos y nuevos sectores de obreros y campesinos, los instruye al precio de los mayores sacrificios, los templa y engendra en ellos un nuevo heroísmo en masa”.

V.I. Lenin, Carta a los Obreros Norteamericanos,
20 de agosto de 1918

“Miles y miles de mártires han ofrendado heroicamente su vida en aras de los intereses del pueblo. ¡Mantengamos en alto su bandera y avancemos por el camino teñido con su sangre!’

Presidente Mao Tse-Tung, Sobre el gobierno de coalición
(24 de abril de 1945),
Obras Escogidas, t. III.

El 19 de junio de 1986, los prisioneros de guerra y los presos políticos, militantes, combatientes y masas, los mejores hijos del pueblo, en las luminosas trincheras de combate del Frontón, Lurigancho y el Callao, se levantaron en rebelión gloriosa contra el genocidio en marcha, tramado por el gobierno aprista, fascista y corporativo y su aprendiz de Führer, el genocida García Pérez. En un vano intento de derrotar la guerra popular, de compensar el fracaso de todos sus planes políticos y militares, el genocida García, su gobierno fascista y las fuerzas armadas reaccionarias sanguinarias desesperadamente planificaron la matanza de los prisioneros de guerra y presos políticos, tal como ya lo habían realizado el año anterior, cuando asesinaron a 30 combatientes en Lurigancho, el 4 de octubre de 1985.

Pero estos nuevos planes siniestros fueron denunciados previamente por el Partido: el 18 de junio, después de denunciar públicamente el genocidio, la tortura, la persecución de prisioneros y sus familiares, los compañeros se rebelaron en defensa de la revolución y de sus vidas, presentando 26 reivindicaciones justas sobre los derechos de prisioneros y sus familiares. El viejo Estado reaccionario, bajo la dirección política de García Pérez y su gobierno y a través de sus Fuerzas Armadas y Policiales, respondieron con una masacre bárbara, atacando las prisiones por aire, mar y tierra, con cañones, bombas y granadas, para después matar a los compañeros sobrevivientes, desarmados, con fusiles y bayonetas – pero después de 20 horas de feroz ataque todavía no habían tomado el control de las prisiones, por la resistencia heroica de los combatientes. Con heroicidad y coraje proletario, los compañeros resistieron y combatieron valientemente y sin vacilación, rechazando y condenando a la siniestra “comisión de paz’ montada por la reacción, tomando prisioneros y dando golpes duros al enemigo, y con orgullo gritando las consignas del Partido y de la guerra popular, dando sus valiosas vidas: ¡Viva el Presidente Gonzalo! ¡Viva el Partido Comunista del Perú! ¡Viva el marxismo-leninismo-maoísmo! ¡Viva la guerra popular! En total, 250 compañeros dieron sus vidas, asesinados por la reacción. Un crimen que el pueblo nunca olvidará – y sólo el pueblo dará el merecido castigo a los responsables: el genocida Alan García, sus ministros, el Comando Conjunto, las Fuerzas Armadas y Policiales así como sus cómplices, los revisionistas oportunistas de la “Izquierda Unida’, los partidos políticos y la iglesia.

Hoy, los mismos asesinos genocidas, el mismo García y Giampetri, quienes tienen sus manos manchadas con la sangre de los prisioneros de guerra y prisioneros políticos, están en el gobierno otra vez, mostrando la crisis profunda y final del viejo y podrido Estado Peruano. Y después de todos sus genocidios, todas sus patrañas y campañas de difamación, está más claro que nunca que han fracasado y siguen fracasando totalmente en su tarea imposible de aniquilar la guerra popular. Así como el Día de la Heroicidad ha dado nuevo impulso a la guerra popular, todas las nuevas patrañas, todos sus nuevos planes genocidas y vendepatrias sólo van a generar más odio de clase, y más guerra popular – lo que podemos ver en las recientes acciones gloriosas realizadas por el Ejército Popular de Liberación y en los informes desesperados en la prensa reaccionaria. Condenamos una vez más su siniestro plan de asesinar a nuestro Jefe el Presidente Gonzalo, y como tratan de servir a este plan a través de insinuar, en los medios de comunicación, que el Presidente Gonzalo está “dirigiendo desde la prisión’. Condenamos y denunciamos a toda esa prensa reaccionaria que al unísono, ya sea gobiernista o de oposición sirve a toda esa campaña de mentiras, calumnias y patrañas contra el Presidente Gonzalo, el Partido y la guerra popular, pagados por la CIA yanqui -pruebas al canto, por mencionar la última, ya en nuestro anterior volante denunciamos a la revista “Caretas’, tenemos la entrevista del periodista Hildebrant al director propietario del diario “La República’ de Lima, “Chicho’ Mohme, aparecida en este mismo diario, donde este plumífero admite que en las reuniones con el agente de la CIA y jefe real del SIN, durante el gobierno de Fujimori, Montesinos, hablaron de dos cosas: “de Abimael…’ (esto es del Presidente Gonzalo) y de “impuestos’ y del “avisaje estatal’ (es decir de la paga por su servicio a todas las patrañas de la CIA – de dinero para su períodico o empresa y para repartir entre los demás medios de comunicación masiva a quienes también representaba en estas conversaciones en su calidad de “Presidente de la Asociación de Diarios’). En cuanto a la extradición del fasista, genocida y vendepatria Fujimori, vemos como se levantan una serie de escándalos en el parlamento, como si fuera cosa nueva, para ocultar como están arreglando bajo la mesa para limpiar a la víbora Fujimori de los crímenes más graves como genocidio y otros, lo cual corresponde hacer a su compinche el fascista, genocida, vendepatria Alán García para retribuir lo que hizo Fujimori el 90-91 en el parlamento dominado por él para esculpar al guadameco por los atroces genocidios cometidos por el gobierno de García. Por eso nos reafirmamos una vez más que sólo el pueblo y sólo el pueblo dará merecido castigo a estos genocidas y que se hará en el curso del desarrollo de la guerra popular.Nos reafirmamos en el principio que, una guerra popular no se dirige desde la prisión, en el hecho de que el Partido ha sido capaz de resolver el problema de la dirección, y que contamos con una dirección probada y reconocida, forjada en la imagen y semejanza del Presidente Gonzalo y que se sujeta firmemente a su Jefatura y a su todopoderoso pensamiento. Una dirección que aplica el pensamiento gonzalo para resolver cada problema nuevo que se presenta en el camino de la revolución, para llevar nuestra victoriosa e invencible guerra popular hasta su meta final, el Comunismo.

Aplicando el pensamiento Gonzalo y enarbolando firmemente los principios del Partido y de la guerra popular, los héroes de las luminosas trincheras de combate convirtieron los planes genocidas de la reacción en un gran triunfo moral, político y militar para el Partido y la revolución, y una derrota que generó una grave crisis política y un mayor desprestigio para el viejo Estado reaccionario. La trilogía monumental del Frontón, Lurigancho y el Callao nos ha dado un ejemplo glorioso de la heroicidad que pertenece a nuestra clase y a los pueblos del mundo –heroicidad que la burguesía nunca puede producir, porque es una heroicidad basada en conciencia de clase y sacrificio desinteresado por la revolución. Como dijo el gran Lenin, es la “heroicidad de una clase ascendente, no decadente, una clase que no teme el futuro, sino que cree en éste y lucha por éste desinteresadamente, una clase que no se aferra al mantenimiento y restauración del pasado para proteger sus privilegios, sino que odia el pasado y sabe como deshacerse de su muerta y agobiante descomposición.” (Traducción nuestra)

¡GLORIA A LOS HEROES CAÍDOS, VIVA LA REVOLUCIÓN!
¡GLORIA AL DÍA DE LA HEROICIDAD!
¡DEFENDER LA VIDA DEL PRESIDENTE GONZALO!
¡VIVA EL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ!
¡GUERRA POPULAR HASTA EL COMUNISMO!
¡LA SANGRE NO AHOGA LA REVOLUCIÓN, LA RIEGA!

Movimiento Popular Perú
19 de junio de 2007