¡Proletarios de todos los países, uníos!

LINEA DE MASAS

Partido Comunista del Perú
1988

LINEA DE MASAS

INTRODUCCION

El Presidente Gonzalo enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo- maoísmo ha establecido la línea de masas del Partido. Parte reafirmándose en la concepción proletaria que debe tenerse para enjuiciar el problema de las masas; plantea el papel político que tienen las masas, la lucha por el Poder a través de la guerra popular y que la lucha reivindicativa debe servirla; cuáles son las masas a las que debemos ir, a las masas básicas principalmente, obreros y campesinos y a los diversos frentes según sus reivindicaciones específicas; aplicando la única táctica marxista de ir a lo hondo y profundo, educarlas en la violencia revolucionaria y en la lucha contra el oportunismo. Especifica que el trabajo de masas del Partido que dirige la guerra popular se hace a través del ejército; señala la importancia de los organismos generados, una de las formas de organizarlas; y que hacemos el trabajo de masas en y para la guerra popular.

1. REAFIRMACION EN EL PRINCIPIO “LAS MASAS HACEN LA HISTORIA”

Se reafirma en el poderoso principio marxista “Las masas hacen la historia” y nos enseña a forjarnos en nuestra concepción comunista en lucha contra la burguesa de centrar en el individuo como eje histórico. Dice: “Las masas son la luz misma del mundo… ellas son la fibra misma, el latido inagotable de la historia… cuando hablan todo se estremece, el orden empieza a temblar, las altas cumbres se agachan, las estrellas tienen otro rumbo porque las masas hacen y pueden todo”.

Esta reafirmación tiene gran importancia ya que es parte de la concepción del proletariado, sustenta la línea de masas y se aplica en todo, permite juzgar desde la cuestión internacional hasta las políticas específicas, es pues un problema ideológico. Ningún hecho histórico, ningún movimiento transformador, ninguna revolución puede hacerse sin la participación de las masas. Se aplica al Partido pues éste tiene carácter de masas y no puede desligarse de ellas si no se extingue o se diluye y, las masas para garantizar el rumbo de su lucha deben ser dirigidas por el Partido. El Partido tiene masas: los militantes, para quienes como comunistas este principio es una necesidad encarnarlo y en brega constante derrotar el podrido individualismo que no es concepción proletaria, en nuestro proceso de guerra popular se observa cómo es que ésta coadyuva poderosamente a tal transformación; además un principio de dirección es “de las masas a las masas”. Para la guerra popular también rige, pues se trata de una guerra de masas, las masas son la fuente misma de la guerra popular y con esta concepción marxista hacemos la guerra popular.

Acentúa particularmente en la rebelión de las masas hacedoras de la historia, nos dice: “Desde los viejos tiempos las masas viven sujetas a opresión y explotación y siempre se han rebelado, es una larga e inagotable historia… Desde siempre, desde que combaten las masas han clamado por organizar la rebelión, su armamento, su levantamiento, que se las dirija, que se las conduzca. Siempre ha sido así y seguirá siendo y después que haya otro mundo seguirá siendo sólo que de otra manera”. “Las masas claman por organizar la rebelión por tanto el Partido, sus dirigentes, cuadros y militantes tienen una obligación hoy perentoria, un destino: organizar el Poder desorganizado de la masa y sólo se hace con las armas en la mano. Hay que armar a la masa poco a poco, parte por parte, hasta el armamento general del pueblo y cuando eso llegue no habrá explotación sobre la Tierra”.

Aquí expresa su absoluta convicción en la masa, en su necesidad histórica y política de rebelarse, de armarse, en la exigencia que se las dirija y organice; emplaza a los Partidos Comunistas a cumplir la demanda que viene desde Marx y Engels quien nos enseñó dos poderes hay sobre la Tierra: la fuerza armada de la reacción y la masa desorganizada. El Presidente Gonzalo nos plantea que si ese Poder lo organizamos lo que es potencia deviene en acto, y lo que es posibilidad realidad, que todo es un castillo de naipes si no se sustenta en la masa y que en concreto el problema es pasar de masas desorganizadas a masas militarmente organizadas.

Organizar a las masas con las armas en la mano, pues ellas claman organizar la rebelión, por tanto, aplicando la guerra popular que es la forma principal de lucha, organizarlas para la toma del Poder dirigida por el Partido. Se compagina plenamente con la contradicción principal en el mundo hoy, con la ofensiva estratégica de la revolución mundial, con la tendencia principal en el mundo, la revolución; apunta además a plasmar lo que Marx señaló, el armamento general del pueblo a fin de garantizar el triunfo de la revolución y a conjurar la restauración, pensamiento de gran perspectiva que nos lleva hasta el Comunismo; solamente organizando ese mar armado de masas se podrá defender lo conquistado y desarrollar las revoluciones democráticas, socialistas y culturales.

Rechaza a quienes plantean que las masas no quieren hacer la revolución o que las masas no apoyarán la guerra popular; nos enseña que el problema no está en las masas porque éstas están prestas a rebelarse sino en que los Partidos Comunistas asuman su obligación de dirigirlas y levantarlas en armas. Deslinda con aquellas posiciones que hoy día sostienen “la acumulación de fuerzas”, que plantean el aglutinar parsimoniosamente a las masas a través del uso de los llamados “espacios democráticos” o uso de la legalidad, acumulación de fuerzas que no corresponde al momento de la lucha de clases internacional y nacional, que no cabe en el tipo de revolución democrática que desenvolvemos y que en la revolución socialista tendrá otros caracteres ya que vivimos una situación revolucionaria en desarrollo desigual en el mundo. Es opuesto y condena las posiciones oportunistas de llevar a las masas a la cola de la gran burguesía, por un camino electorero o por una acción armada bajo el mando de una superpotancia o potencia.

Así, pues, enarbola la gran divisa del Presidente Mao “La rebelión se justifica” y concibe que el problema de masas hoy está en que los Partidos Comunistas movilicen, politicen, organicen y armen a las masas para tomar el Poder especificando la guerra popular.

Especifica la necesidad de organizar científicamente la pobreza, el Presidente Gonzalo remarca que los más prestos a rebelarse, quienes más claman organizar la rebelión son los más pobres de las masas, y que hay que prestar particular atención a la organización revolucionaria, científica de las masas; ésto no va contra el criterio de clases, pues nos demuestra que la pobreza tiene su origen en la explotación, en la lucha de clases: “Existe miseria y está junto a fabulosa riqueza, hasta los utópicos lo sabían, que ambas andan juntas: ingente y desafiadora riqueza junto a denunciadora y clamante pobreza. Y es así porque la explotación existe”.

Tesis entroncada con Marx quien descubrió la potencia revolucionaria de la pobreza y la necesidad de organizarla científicamente, esto es para la revolución, quien nos enseñó que el proletariado no teniendo propiedad es clase creadora y única que destruirá la propiedad y se destruirá a sí misma como clase. Con Lenin, quien nos enseña que la revolución social no surge de los programas sino del hecho de que millones de personas dicen antes de vivir padeciendo de hambre preferimos morir por la revolución. Y con el Presidente Mao, quien concibe que la pobreza impulsa el anhelo de cambio, de acción, de revolución, que es una hoja de papel en blanco, desnuda y en ella se pueden escribir las palabras más nuevas y hermosas.

Toma en cuenta las condiciones específicas de nuestra sociedad y nos enseña que, en el Perú hablar de masas es hablar de masas campesinas, de campesinado pobre, que los años 20, 40, 60 del presente siglo demuestran que son las luchas campesinas las que remecen la base misma del Estado pero faltándoles la guía: la ideología marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo, el motor: la guerra popular y la dirección justa y correcta del Partido Comunista, no pudieron enrumbarse correctamente hacia el Poder y su sangre derramada fue usada para aherrojarlas y amoldarlas al viejo orden; baños de sangre inolvidables que dejan extraordinarias lecciones. Los 80 muestran que ha empezado la verdadera movilización de las masas campesinas armadas organizadas en Partido Comunista, Ejército Guerrillero Popular y están dando su preciosa sangre por el nuevo Poder que florece y se desarrolla a través de la guerra popular.

Esta particularidad es estratégica porque permite comprender que la revolución en el mundo se define por el lado de los más pobres, que constituyen la mayoría y son los más prestos a rebelarse y que a su vez en cada revolución debe irse a los más pobres aplicando los tres requisitos que requiere organizar la pobreza científicamente: ideología, guerra popular y Partido Comunista.

Así, nos dice: “La pobreza es una fuerza impulsora de la revolución, los pobres son los más revolucionarios, la pobreza es el más hermoso canto; …la pobreza no es un baldón, es honra, nuestras serranías con sus masas son la fuente de nuestra revolución que con sus manos dirigidas por el Partido Comunista va a construir un nuevo mundo; guía: la ideología, motor: la lucha armada, dirección: el Partido Comunista”.

2. LO PRINCIPAL DEL TRABAJO DE MASAS ES EL PODER, LA LUCHA REIVINDICATIVA ES NECESARIA

Basándose en el Presidente Mao quien generaliza la violencia revolucionaria como ley universal para la toma del Poder y establece que la forma principal de lucha es la lucha armada y la forma principal de organización es la fuerza armada; que antes del estallido de una guerra, todas las luchas y organizaciones deben servir a prepararla y una vez iniciada la guerra deben servir a desarrollarla, el Presidente Gonzalo nos enseña que en el trabajo de masas la lucha por el Poder y la lucha reivindicativa son dos caras de una misma moneda siendo la lucha por el Poder la primera y principal reivindicación de la masa.

Organizar a las masas para que vayan más allá de lo que permite el ordenamiento legal existente, que luchen por destruir el viejo orden y no para mantenerlo, esto es en los tres instrumentos de la revolución: Partido a donde concurren los menos, Ejército van más y en nuevo Estado-Frente que es la base que aglutina a las masas por saltos y progresivamente, en el campo en Comités Populares y en las ciudades en Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo. Romper así la tradición electorera frentista que aplican los revisionistas y oportunistas de soslayar la lucha del campesinado y en las ciudades no tomar lo principal, esto es, el Poder por la guerra.

Centrar en el Poder exige también organizarlas en las diversas formas nuevas que demandan las nuevas formas de lucha, pues la guerra imprime cambios en la lucha y organización de las masas. Como Lenin nos enseña, en épocas de revolución hay que conformar organizaciones nuevas e ir contra los viejos dirigentes que lo que buscan es vender la revolución por acomodarse dentro del sistema reaccionario. Ya no se puede, pues, usar las viejas formas de lucha y de organización de las masas.

La lucha por el Poder como principal no quiere decir que desde el comienzo vamos a incorporar a las masas de una sola vez, pues el Presidente Mao nos enseña que desarrollando Bases de apoyo y fuerza armada es que se generará el auge de la revolución; tiene pues, que ver con la ley de incorporación de las masas a la revolución, establecida en el Partido en el II Pleno de 1980, incorporación que será por saltos y progresivamente; a más guerra popular mayor incorporación de las masas, pues, la guerra popular es un hecho político que va machacando con acciones contundentes las ideas en la mente de los hombres, quienes poco a poco van entendiendo su único y verdadero camino, desarrollando así su conciencia política; la guerra popular convoca a todos los revolucionarios y al desarrollarse se abre camino a sí misma.

Las masas están ávidas de política y a los comunistas nos incumbe organizarlas y dirigirlas. En todas partes las masas tienen problemas concretos y debemos preocuparnos por ellos y atenderlos, el trabajo de masas se hace dentro de la lucha de clases y no al margen de ella. Si nosotros no lo hacemos los reaccionarios y revisionistas los utilizarán para sus fines ya sea desarrollar fascismo y corporativizarlas o para entregar sus luchas a otro amo imperialista, son dos voluntades distintas y opuestas.

Las masas buscan la voz de los que afirman no de los que dudan. En nuestro Partido, en el Inicio, el Presidente Gonzalo demandó que nunca nadie dude de las masas, combatir a aquellos ciegos y sordos a la voz de las masas, escuchar su más leve rumor y atender sus problemas concretos y cotidianos; a las masas nunca se las engaña, ni se las fuerza, deben saber los riesgos que han de afrontar, convocarlas a la cruenta y larga lucha por el Poder pero teniendo tal fin éstas comprenderán que será una lucha victoriosa y necesaria.

Así la lucha por el Poder es principal pero no se puede separar de la lucha reivindicativa, son dos caras de una misma moneda y esta última es lucha necesaria.

¿Cómo concebir la lucha reivindicativa? Se nos imputa no tener línea específica para la lucha económica y política de las masas; lo que pasa es que aplicamos otra manera, otra forma, otra política contraria a la oportunista o revisionista, una manera nueva y distinta a la tradicional. El Presidente Gonzalo nos enseña que la lucha reivindicativa es la otra cara de una moneda, que tiene el Poder al anverso y es totalmente erróneo separarlas, hablar solamente de lucha reivindicativa es revisionismo. Y especificando la tesis de Marx a nuestra sociedad nos dice:

“La crisis nos plantea dos problemas: primero, cómo defender lo conquistado ya que, si bien en las crisis las conquistas se pierden más se perdería cuanto menos se las defienda; ésa es la necesidad de la lucha reivindicativa…, lucha económica y lucha política…, además va forjando a la clase y a los trabajadores en su lucha por el Poder. Segundo, ¿cómo acabar con las crisis? No se podrá acabar con ellas si no se acaba con el orden social predominante… necesidad de la lucha revolucionaria para que sirva a la toma del poder por la lucha armada bajo la dirección de su Partido… no se puede separar una de la otra. La relación de ambos problemas se concreta en desarrollar la lucha reivindicativa en función del Poder”.

Para llevar adelante la lucha reivindicativa se utiliza el sindicato y la huelga que es la forma principal de la lucha económica del proletariado, desarrollándola como guerra de guerrillas que educa a la clase en la lucha por el Poder y elevándola a través de acciones armadas concretas que potencia esta forma de lucha dándole una calidad más alta.

Así, hay que desarrollar la lucha reivindicativa en función del Poder, éste es un principio político del trabajo de masas.

3. ¿A QUE MASAS IR?

Hay que partir del criterio de clase para resolver a qué masas ir; hay que ver que éstas se organizan según los intereses comunes de las clases a que pertenecen; esto es muy importante, nos enseña el Presidente Gonzalo, pues, sirve para combatir a quienes pretenden separar masas de clases con el cuento de la “unidad” y lo que hacen es traicionar los verdaderos intereses de las masas traficando con sus luchas. También porque permite comprender que las masas son siempre arena de contienda y burguesía y proletariado pugnan por dirigirlas y sólo el Partido Comunista es el único capaz de dirigirlas porque es el único que puede representar y bregar por sus intereses; quienes hablan de “democracia de masas” o montan organismos de masas abiertos como si fueran forma de Poder y sin violencia no mantienen sino posiciones burguesas que niegan la dirección del proletariado, su dictadura.

Partir del criterio de clases tiene que ver con el carácter de la revolución, con las clases que conforman el pueblo y que deben ser unidas bajo dirección del proletariado; en nuestro caso de revolución democrática el proletariado dirigente, el campesinado principal, la pequeña burguesía firme aliado y la burguesía media, dual, por tanto las masas básicas a las cuales hay que ir son el proletariado y el campesinado principalmente pobre, a la pequeña burguesía y también a la burguesía media.

Teniendo en cuenta las reivindicaciones específicas de las masas, debe diferenciarse cuáles son los sectores de las masas que sufren más opresión a fin de organizarlas para que luchen por arrancar conquistas y resolver su contradicción específica. Se refiere a los frentes de las masas en los cuales hay que trabajar; son los obreros, el proletariado, clase dirigente de todas las revoluciones, clase cuyo objetivo político principal y decisivo es la conquista del Poder por la guerra popular para emanciparse, emancipar a las demás clases y finalmente destruirse como clase, tiene como reivindicaciones específicas arrancar conquistas y derechos como salario, jornada y condiciones de trabajo. Para lo cual hay que desarrollar el movimiento obrero, sus luchas, movilizaciones, marchas, agitaciones, huelgas con acciones armadas, “preocuparse por los problemas fundamentales de la clase y también de los trabajadores, de sus problemas generales y concretos por los cuales cotidianamente combaten”.

Los campesinos que siendo la fuerza principal, especialmente los campesinos pobres luchan por la conquista de la tierra por medio de las armas bajo la dirección del Partido Comunista, no verlo así lleva a “toma de tierras” y amoldarse al viejo orden. Desarrollar más el movimiento campesino aplicando los “tres con” vivir, trabajar y luchar con ellos y hacerlos campesinos con mente proletaria.

Las mujeres que son la mitad del mundo y desarrollar el movimiento femenino por la emancipación de la mujer, tarea que es obra de las mujeres mismas pero bajo la dirección del Partido; combatir la tesis burguesa de la liberación de la mujer. Ellas luchan contra el alza constante del costo de vida que golpea la integridad física de la clase y del pueblo; movilizar a las mujeres obreras, campesinas, intelectuales, etc… .

Los intelectuales para que cumplan su papel de intelectuales revolucionarios al servicio del proletariado, del campesinado, en la guerra popular; dentro de ellos están los estudiantes secundarios, universitarios, profesionales, etc.; ver sus reivindicaciones específicas, que defiendan lo conquistado y apunten a una nueva cultura nacional, científica y de masas, haciéndolos conscientes que sólo lo lograrán con la revolución.

Movilizar a las masas pobres de las ciudades que están en los barrios y las barriadas, contra el hambre y la miseria, que combatan por el programa de la revolución, convocarlos a la guerra popular, que arranquen conquistas y derechos cada día más conculcados; no permitir que sean golpeados impunemente y que aprendan a defenderse, que resistan a la agresión del enemigo usando todos los medios de que disponen; aplicar el “¡Combatir y resistir!”, que es consigna común para la clase.

Movilizar a los jóvenes para que participen directamente en las primeras líneas de las trincheras de combate de la guerra popular; jóvenes obreros, campesinos, estudiantes; que desarrollen sus luchas por un nuevo mundo, su derecho a educarse, contra la desocupación y demás males que los azotan.

Hacer que los niños participen activamente en la guerra popular, pueden cumplir diversas tareas a través de las cuales vayan comprendiendo la necesidad de transformar el mundo, ellos son el futuro y a fin de cuentas quienes vivirán el nuevo mundo; cambiar su ideología y que adopten la del proletariado.

4. PERSISTIR EN LA UNICA TACTICA MARXISTA-LENINISTA-MAOISTA

Partiendo de la tesis de Engels: “En un país de movimiento político y obrero tan antiguo hay siempre un montón colosal de basura tradicionalmente heredada que es preciso limpiar por grados”; que Lenin estableció: “La única línea marxista en el movimiento obrero mundial consiste en explicar a las masas que la escisión con el oportunismo es inevitable e imprescindible, en educarlas para la revolución en una lucha despiadada contra él”; y que el Presidente Mao señaló que se abre un período de lucha contra el imperialismo y el revisionismo, siendo el revisionismo una de las fuentes principales de guerras imperialistas y para los comunistas en general un peligro dentro del Partido. El Presidente Gonzalo llama a persistir en la única táctica marxista que implica cuatro cuestiones:

Primero, barrer el montón colosal de basura que es el revisionismo y el oportunismo principalmente electorero, ninguno de estos revisionistas ni oportunistas, ni ninguno de sus congéneres puede representar ni menos defender a las masas, pues, así como ayer sólo defendieron a los explotadores de turno hoy son furgón de cola del gobierno aprista fascista y corporativo, arrastrando siniestramente en ese rumbo a las organizaciones gremiales de ellos dependientes. Todas estas organizaciones políticas y gremiales y sus dirigentes no representan al pueblo sino a esa costra de la aristocracia obrera, a la burocracia sindical y a los partidos obreros burgueses que siempre pretenden desviar a las masas de su camino y no son sino parte de ese montón colosal de basura que debe ser necesariamente barrido por partes y gradualmente como dijera Engels.

Segundo, ir a lo hondo y profundo de las masas que constituyen la mayoría, que en nuestro país son los obreros y campesinos principalmente pobres, a la pequeña burguesía y también tener en cuenta la burguesía media; pero de éstas las que son básicas son obreros y campesinos principalmente pobres y a ellos principalmente debemos ir tanto en campo como en ciudad. Impulsar su propio movimiento, dirigirlo, movilizarlos por el Poder para así traer abajo y derrumbar el viejo Estado. Esta es la cuestión principal de la táctica. Así, en las masas es necesario distinguir la nata superficial que es la costra que sirve a la reacción, de las inmensas mayorías hondas y profundas que emergerán más y más hasta el barrimiento del caduco Estado peruano, más aún si una guerra popular viene desmoronando el viejo Estado peruano.

Tercero, a las masas hay que educarlas en la guerra popular, en su teoría y práctica, pues, educarlas en la paz de las bayonetas es permitir que las sigan degollando; las masas ya no deben derramar su sangre impunemente para ser traicionadas por sus falsos dirigentes, para la capitulación, sino que esa preciosa sangre debe servir para la conquista del Poder para la clase y el pueblo.

Cuarto, necesidad de lucha implacable contra el revisionismo y el oportunismo, combatirlo como peligroso cáncer dentro y fuera del Partido y en las propias masas si no éstas no concretarán su camino. Lucha que venimos librando desde la reconstitución del Partido y que hoy en plena guerra popular es más urgente e implacable por la forma crecientemente delatora en que actúan contra nosotros, el pueblo y la revolución, máxime si tras ellos opera el socialimperialismo dentro de su colusión y pugna con el imperialismo yanqui por la hegemonía mundial. Lo que es aplicable al revisionismo y oportunismo de toda ralea cualquiera sean sus representantes.

Al respecto el Presidente Gonzalo nos dice: “Levantarse sobre esa miasma, esa superficie revisionista, oportunista, electorera y cabalgadora de las masas; lo principal es que debajo se agita la masa colosal y autoimpulsada sobre la cual operamos nosotros con el más poderoso instrumento de la rebelión que existe sobre la Tierra: la acción armada. Somos el grito que dice: `La rebelión se justifica’ “.

5. LA ORGANIZACION DE LAS MASAS

El Presidente Gonzalo partiendo de las bases ideológicas y políticas y simultaneamente la construcción organizativa, establece las formas de lucha y las formas de organización de las masas. Nos enseña cuál es el proceso seguido en el trabajo de masas del Partido:

En la Constitución. Nos dice que Mariátegui sienta bases para el trabajo de masas del Partido y fija líneas específicas librando lucha de dos líneas contra el anarquismo que soslayaba la necesidad del Partido y también contra el Apra que negaba la concepción marxista-leninista y la capacidad de la clase para constituirse en Partido Comunista, centrando en Frente.

En los años 30, muerto Mariátegui se abandona su línea y se centra en masas poniéndolas a la cola de la gran burguesía desviándolas hacia “frentismo”, elecciones, revisionismo pese a los esfuerzos de la línea roja por oponerse; táctica errónea que duró más de 30 años.

En la Reconstitución. El Presidente Gonzalo establece la línea de masas del Partido y las formas orgánicas, esto es un periodo de más de 15 años de dura lucha de dos líneas concretando saltos parciales. Así, en la primera política estratégica de la Reconstitución desenvuelve los inicios del trabajo de masas del Partido, todos los militantes en Ayacucho hacían trabajo campesino y con los obreros de construcción civil, por ejemplo, también con los intelectuales y masas pobres de los barrios; apoyó las invasiones de tierras, realizó eventos

campesinos, siendo de trascendencia la I Convención Regional de Campesinos de Ayacucho donde se estableció el programa agrario; dirigió las históricas luchas del 20, 21 y 22 de Junio de 1969 de Ayacucho y Huanta, movilizando a las masas de estudiantes secundarios y padres de familia contra el decreto 006 de Velasco consiguiendo su derogación; organizó el Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho, reorganizó el Frente Estudiantil Revolucionario (FER), creó el Movimiento Femenino Popular (MFP), el Centro de Trabajo Intelectual Mariátegui (CETIM), el Frente Revolucionario de Estudiantes Secundarios (FRES) y el principal de todos el Movimiento de Campesinos Pobres (MCP). Así, sentó nuevas políticas en trabajo de masas, nuevas formas de lucha y nuevas formas orgánicas.

En lucha de dos líneas lidió contra el revisionismo que llevaba a las masas al electorerismo, contra la violencia revolucionaria y a preservar el viejo orden; combatió a Patria Roja forma de revisionismo que traficaba como hasta hoy con el lema el “Poder nace del fusil”, negaba la semifeudalidad centrando en pequeña burguesía, especialmente en estudiantes y maestros. Derrotó también al liquidacionismo de derecha que diluía la dirección del Partido en las masas, pregonaba legalismo y decían todo a través de la Confederación Campesina del Perú (CCP), que los campesinos no entendían confiscación sino expropiación y que debía profundizarse las medidas fascistas y corporativas de Velasco.

En la segunda política estratégica de la Reconstitución, establece los Organismos Generados acordados en el III Pleno del 73: “Los movimientos propios como organizaciones generadas por el proletariado en los diferentes frentes de trabajo; sus tres caracteres 1) Adheridos a Mariátegui, 2) Organizaciones de masas y 3) Ceñidos al centralismo democrático”. Fundamentó el carácter, contenido y papel de los Organismos Generados aplicando las tesis de Lenin sobre el Partido clandestino y puntos de apoyo del Partido en las masas, con la experiencia china sobre el trabajo abierto y secreto. Especificó la necesidad de que para desarrollar la Reconstitución del Partido éste debía abrirse más a las masas, política que para acordarse y plasmarse tuvo que derrotar al liquidacionismo de izquierda que partía de que el fascismo barre todo, aislaba al Partido de las masas apuntando a su extinción, menospreciaba al campesinado, al proletariado y pregonaba “basta línea”.

Derrotada la línea liquidacionista de izquierda los vínculos con las masas crecen y se va a formar las Escuelas Populares, escuelas de politización de las masas en la concepción y línea del Partido, que cumplieron un importante papel en la agitación y propaganda ligando la lucha reivindicativa con la lucha por el Poder; cumpliendo un estudio sistemático y planificado en base a esquemas, librando la lucha de dos líneas y desarrollando trabajo de masas.

El avance del trabajo de los Organismos Generados llevó a que el Presidente Gonzalo plantee el desarrollarlos como un solo torrente, bajo la guía política de iniciar la lucha armada y se pasó a conformar el trabajo zonal y se estableció la Coordinación Metropolitana para las ciudades aplicando las tesis de Lenin para el trabajo abierto, del Presidente Mao sobre el trabajo en ciudad y que las luchas de las masas deben desenvolverse con razón, ventaja y límite. Su aplicación nos permitió mantener el Partido clandestino, emboscado en las masas, mover buen número de activistas, en corto tiempo distribuir la propaganda, facilitó la agitación y movilización bajo un plan centralizado por el Partido.

Todo ésto es lo que llamamos “las tres patitas” para el trabajo de masas en las ciudades: Organismos Generados, Escuelas Populares y la Coordinación Metropolitana. Para el campo aplicamos las dos primeras formas.

En la tercera política estratégica de la Reconstitución, el Partido desarrolló ampliamente su trabajo de masas en las zonas de la Sierra vinculándose al campesinado pobre principalmente y en las ciudades con el proletariado y las masas de barrios y barriadas. Los organismos generados han jugado un buen papel dentro de la culminación de la reconstitución y sentar bases para la lucha armada. Se desarrolló aun más las líneas específicas, así para el Movimiento de Obreros y Trabajadores Clasistas (MOTC) se plantean las 15 tesis básicas para el movimiento obrero; en el Movimiento de Campesinos Pobres (MCP) se les politiza en el programa agrario especificado a las nuevas condiciones; en el Movimiento Clasista Barrial (MCB) se publicó el Pliego de denuncias y demandas del pueblo; en el Frente Estudiantil Revolucionario (FER) se desarrolló más la tesis de la Defensa de la Universidad contra la corporativización; en el Frente Revolucionario Estudiantil Secundario (FRES) se impulsó la lucha de los secundarios por la educación popular; en el Movimiento Femenino Popular (MFP) se enarboló la tesis de la Emancipación de la mujer impulsando la movilización de las mujeres obreras, campesinas, barriales, estudiantiles. Además, se participó en el Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación Peruana en el que por los años 70 se sentó su línea específica clasista. También se conformó la Federación Nacional de Docentes de la Universidad Peruana. Y todo este trabajo entró a una amplia movilización ideológica-política para iniciar la guerra popular.

En síntesis, todo el trabajo de masas del Partido en la Reconstitución fue para preparar el inicio de la guerra popular, pues, como nos enseña el Presidente Mao antes de iniciar la guerra todo es para prepararla y una vez iniciada todo es para desarrollarla. El Presidente Gonzalo ha aplicado y desarrollado firmemente este principio.

En la dirección de la guerra popular se va a dar un gran salto en el trabajo de masas del Partido, salto cualitativo, pues se plasma la forma principal de lucha: la guerra popular y la forma principal de organización: el Ejército Guerrillero Popular; esta altísima tarea es llevada adelante a través de la militarización del Partido y en lo que respecta al trabajo de masas significa que todo el trabajo de masas se hace a través del Ejército Guerrillero Popular, pues como es ejército de nuevo tipo tiene que cumplir tres tareas: el combatir, el movilizar y el producir; concebimos que la segunda tarea del ejército que es la movilización implica movilizar, politizar, organizar y armar a las masas, tarea que no se contrapone con el combatir que es la principal, ya que se aplica el principio de concentrar para el combate y dispersar para la movilización, aparte que las masas se van educando en la guerra; principio que rige en las tres fuerzas: principales, locales y de base en las que se especifican diversos grados de acciones.

Para la movilización de las masas, el Partido a través del EGP lleva adelante las Escuelas Populares, conforma los Organismos Generados, los grupos de apoyo, política que aplica de una manera en el campo puesto que ahí se conforma nuevo Poder y de otra en las ciudades, pues allí se conforma Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo apuntando a la futura insurrección.

En el campo, ahí donde tenemos Poder, Bases de Apoyo, Comités Populares hacemos participar a toda la masa armadamente, organizada en Partido, Ejército y Frente-Estado. Si no se organiza a toda la masa el nuevo Poder no podrá sostenerse por mucho tiempo, no cabe masas amorfas ni Poder sin masas organizadas bajo la dirección del Partido.

En las ciudades el trabajo de masas se cumple igualmente a través del Ejército y lo principal es la lucha por el Poder a través de la guerra popular, siendo la lucha reivindicativa en función del Poder necesario complemento; obviamente, con acciones armadas diversas a fin de concretar las formas nuevas de organización. Plasmamos el Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo (MRDP), aglutinando masas obreras, campesinas, barriales, pequeñoburguesas; neutralizando a la burguesía media, apuntando a las fuerzas democráticas que estén por la guerra. El objetivo es llevar a las masas a la resistencia y a la elevación de sus luchas en guerra popular, para entrabar, socavar y perturbar al viejo Estado y servir a la futura insurrección preparando a las ciudades con guerra popular especificada como complemento. Usamos la doble política de desarrollar formas propias que es lo principal y penetrar todo tipo de organizaciones. Aplicamos ¡Combatir y Resistir!.

En cuanto a los Organismos Generados, en la guerra popular han expresado un desarrollo y sus caracteres han tenido una variación; siguen siendo organismos de masas del Partido y hoy en día: 1) Se guían por el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo; 2) Se rigen por el centralismo democrático y 3) Sirven a desarrollar la guerra popular. En el campo los Organismos Generados son militarizados, en las ciudades se puede aplicar diversos grados de militarización. Hoy tenemos los siguientes: MOTC, MCP, MCB, MFP, MJP, MIP; es importante el Socorro Popular del Perú que ha surgido en la guerra popular como parte de la lucha por los prisioneros de guerra y desaparecidos. Para el trabajo partidario en el extranjero también se ha conformado el Movimiento Popular Perú (MPP) con sus tareas específicas.

Hoy a casi ocho años de guerra popular el Partido ha dado un gran salto en su trabajo de masas probando lo justo y correcto de desenvolver el trabajo de masas en y para la guerra popular. Como resultado de su aplicación nuestro pueblo está aprendiendo cada día más que la lucha de clases lleva necesariamente a la lucha por el Poder y es muy expresiva su participación creciente en la guerra popular la cual si bien todos no alcanzan a comprenderla ven en ella la esperanza concretada de su emancipación; están desarrollando sus luchas con formas nuevas de lucha y organización y la lucha de clases en el Perú se ha elevado hasta su forma principal: la guerra popular; las masas están organizadas en guerra popular y son base y sustento de ésta, están organizadas en Partido Comunista, en Ejército Guerrillero Popular y principalmente en Nuevo Poder, conquista principal de la guerra popular en el que obreros, campesinos y pequeña burguesía participan de éste y lo ejercen como nunca antes en la Historia.

Saltos cualitativos que dan condiciones para el nuevo capítulo en el trabajo de masas en y para la guerra popular hacia la conquista del Poder en todo el país.

Los marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo asumimos el encarnar la línea de masas del Partido y aplicarla dando nuestras vidas para que el Partido tome el Poder en el país y sirva a la revolución mundial.

¡ENCARNAR LA LINEA DE MASAS DEL PARTIDO!

¡ORGANICEMOS EL CLAMOR DE LAS MASAS POR SU REBELION!

¡DAR EL GRAN SALTO EN LA INCORPORACION DE LAS MASAS EN Y PARA LA GUERRA POPULAR!
1988

PCP